¿Alguna vez tocaste un botón o intentaste cerrar un pop-up, y de repente terminaste en una página que no querías visitar? ¿O te viste en un carrito de compras a segundos de comprar algo que ni siquiera pensabas comprar?
No sos vos. Es diseño usado de manera equivocada.
Navegamos por internet casi en piloto automático, siguiendo patrones que aprendimos después de años usando sitios y apps. Y a veces, esos mismos patrones son manipulados para empujarnos a hacer cosas que no **elegimos. En UX, a eso le llamamos dark patterns.
El término fue acuñado por Harry Brignull en 2010. Los definió como “trucos usados en sitios y aplicaciones que te hacen hacer cosas que no querías hacer”.
Brignull también documentó los tipos más comunes de dark patterns: desde flujos pensados para no escapar, hasta las formas de empujar a los usuarios a compartir información personal o aceptar algo por error.

Los cinco básicos
Con el tiempo, algunos dark patterns, sobre todo los relacionados con datos personales, se volvieron ilegales en países como Reino Unido o Estados Unidos.
A partir del trabajo de Brignull, el laboratorio UXP² de Purdue University identificó cinco tipos principales:
Insistencia molesta
Interrupciones pequeñas pero insistentes que cortan el flujo de la persona al intentar hacer algo. Lo más común: pop-ups que aparecen constantemente, tapan la interfaz y te sacan del foco.

Obstrucción
Hacer que una tarea sea más difícil a propósito. La idea es desincentivar una acción que no conviene al negocio.

Acciones encubiertas
Esconder, disfrazar o retrasar información importante para que la persona haga algo que quizá evitaría hacer si contara con toda la información. El ejemplo clásico: cargos extra que aparecen recién al final del checkout.

Interferencia de la interfaz
Manipular la interfaz para que ciertas acciones sean más difíciles de encontrar o entender. Un truco típico es hacer que un link importante parezca deshabilitado.

Acción forzosa
Obligar a la persona a realizar una acción para acceder a una funcionalidad. A veces es explícito (“aceptá todo para continuar”) y otras aparece como una “opción” que en realidad no lo es.

¿Sirve de algo usar dark patterns?
La respuesta corta: no.
Es verdad que pueden levantar conversiones en el corto plazo. Pero la gente no es ingenua: cuando siente que la engañaron, la confianza desaparece. Y sin confianza, no hay lealtad. Ahí es cuando llegan las malas reseñas, sube la presión sobre el equipo de soporte y la marca empieza a sufrir.
Los dark patterns evolucionan todo el tiempo para esquivar regulaciones. Equipos de marketing y ventas suelen apoyarse en sesgos psicológicos para empujar decisiones, mientras organizaciones de consumidores luchan por frenarlos.
Como diseñadores y diseñadoras, nuestro rol es abogar por la transparencia y ayudar a los equipos a entender los riesgos a largo plazo de estas tácticas. Diseñar de forma ética no solo es lo correcto: también es mejor negocio.
Referencias
https://darkpatterns.uxp2.com/
https://uxdesign.cc/dark-patterns-9893291b5850
https://www.deceptive.design/types
https://www.pwc.com.au/digitalpulse/dark-patterns-ux-user-experience.html
https://www.smashingmagazine.com/2020/05/convince-others-against-dark-patterns/
Más sobre este tema
crsreports.congress.gov/product/pdf/IF/IF12246
Bringing Dark Patterns to light

